Nadie nace queriendo leer, por eso, el interés por la lectura se debe inculcar a un bebé desde la cuna y tratar, con persistencia y dedicación, que se convierta en un hábito. Me apoyo en que es fundamental para los niños que aprendan a buscar conocimientos mediante la lectura desde la más temprana edad. Los niños deben oír historias contadas por sus padres desde muy pequeños y lo ideal es tener fijada una hora al día para hacerlo, que se convierta en costumbre, por ejemplo, como se da en muchos casos, antes de dormir. Para mi no es necesario esperar a que un niño lea para que él pueda tener contactos con los libros.
También hay libros para todas las edades. Libros sólo con imágenes, para que los padres vayan indicando el nombre de cada imagen, hay libros con vocabulario, es decir que además de la imagen lleva también el nombre debajo de la misma, para que el niño vaya visualizando las letras y las palabras, los libros con texto e ilustraciones para los niños que ya saben leer...
Los padres de niños que todavía no saben leer deben leer una y otra vez lo que sus hijos les piden debido a que no deben limitar sus gustos. Después de la lectura me parece imprensindible hablar con el niño o niña de lo que see ha leido, preguntar si le ha gustado, si se identifica con algún personaje... Esa es una forma de unión entre padre/madre hijo/hija, ya que conocerán sus gustos, su personalidad...
Para terminar con esta entrada, me gustaría recalcar que los padres deben valorar el momento de lectura de los hijos como se merece, porque supondrá la adquisición de muchisimos aspectos beneficiosos por parte del niño.
Estoy de acuerdo Alba, debemos fomentar la lectura, ya que se trata de un entretenimiento muy sano y didáctico.
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